Lo bien que sienta el fin de semana cuando hace buen tiempo, ¿verdad? Bueno, y con mal tiempo también que así no te sabe mal quedarte en casa sin hacer absolutamente nada.
La verdad es que yo tengo el don de poder estar sin hacer nada y que no se me caiga la casa encima. Puedo estar viendo en la tele una peli malísima, jugueteando con el móvil, haciéndole mimos a Buck e incluso mirando al techo. Y sí, no pasa nada. El mundo no se cae ni viene un grupo de piquetes para echarte en cara que no estás disfrutando del día.
Lo disfrutas, pero a tu manera, ¿no?
Es como cuando le preguntas a un hombre en qué está pensando. Siempre te dirá: «En nada».
Yo eso no me lo creo (o no lo creía) pero después de unos añitos tropezándome con todo tipo de hombre, empiezo a creer que es verdad. Pueden estar minutos sin pensar en nada y sobreviven. Igual que yo un domingo por la tarde, pero con una diferencia: aunque yo no haga NADA pienso mucho. Creo que aquí está la cuestión. En esos momentos de no hacer nada es cuando tengo las mejores ideas, veo con distancia las cosas y tomo decisiones. Es en esos momentos de sofá y peli mala, justo antes de dormirme y después de despertarme y cuando voy conduciendo cuando he tomado las decisiones más importantes en mi vida. Así de simple.
En fin, que después de mi autoanálisis, os explico el postre que traigo hoy: Canutillos de chocolate y coco.
Los canutillos están hechos con pasta brick y el relleno con chocolate y nata. Para acabar de rematarlo, el pie está decorado con chocolate y coco una combinación que me encanta.
Para la ocasión tomé el cava rosé NU Reserva de Maset del Lleó, que es afrutado con ese punto ácido del cava que compensa muy bien la unutosidad del postre. Una delicia.
La idea de la receta la saqué de Dulces Bocados que tiene unos postres para quitarse el sombrero.
Espero que os guste.
¡Disfrutad de la semana!
Ingredientes:
4 hojas pasta brick
50 gr de mantequilla derretida
100 ml de nata montada 35,1%
100 gr de chocolate para fundir
15 gr. de azúcar glass
Para decorar el pie:
100 gr de chocolate
100 gr aprox de coco rallado
Elaboración:
Precalentar el horno a 180º.
Si tenéis moldes cilíndricos perfecto, los engrasáis con la mantequilla derretida. Si no tenéis, como yo, cogéis tapones de corcho de vino y los envolvéis con papel de aluminio y los engrasáis con la mantequilla.
Extender la pasta brick y pintar la cara superior de cada una con la mantequilla derretida, cuando tengamos una hoja pintada, ponemos encima otra nueva y pintamos. Así con las cuatro. Cuando las tengamos, cortamos longitudinalmente las hojas en partes aprox 6 tiras, (una encima de otra de forma que cada corte llevará 4 capas). Cada una de esas tiras, cortarlas por la mitad de forma que os queden 12 canutillos.
Enrollamos los tapones de cocho con el aluminio con cada trocito y pintamos un poquito más la pasta para que se dore y quede la unión bien pegada. Introducimos en el horno durante 10-12 minutos.
Cuando los canutillos estén, los dejamos reposar y cuando estén tibios los desmoldamos con cuidado. Fundimos el chocolate para hacer el pie y mojamos cada uno en chocolate y traspasamos a un bol con el coco. Dejamos reposar hasta que estén fríos (en la nevera).
Mientras, montamos la nata con el azúcar y deshacemos el chocolate. Cuando el chocolate esté tibio lo mezclamos con la nata con movimientos envolventes. Lo traspasamos a una manga pastelera y rellenamos cada canutillo con la mezcla. Podemos espolvorear cada uno con un poco más de coco. Dejamos reposar en la nevera 30 min mínimo y servimos.
Qué maravilla de canutillos, me encanta el toque de la base con el coco y el chocolate, riquísimo y monísimo. Yo hace poco hice unos conos con pasta brick rellenos, pero nada que ver con la buena pinta que tiene tu postre. Ah, lo que estar sin hacer nada en el sofá es un don que también tengo, jeje… Besos